lunes, 10 de mayo de 2010

El norte sí que existe

Hace unos meses empecé la difícil misión de intentar describir y por ende clasificar, las diferentes fiestas a las que he acudido en mi dilatada y perversa vida. El comienzo que dediqué al “London Rubber Ball” fue sin lugar a dudas complicado, ya que me granjeé algunos comentarios escritos y verbales poco agradables, por expresar lo que realmente opino de estas fiestas y, en particular, al compararlas con las que se realizan en la península.

Por eso hoy, cuando la resaca “Munichera” todavía se nota en mi ser y a punto de salir al aeropuerto de vuelta a Madrid, con la venia del Señor Volcán que ayer nos dejó tirados en el aeropuerto; me dispongo a intentar tamaña labor, no sin antes abrir el paraguas por el granizo que sin lugar a dudas me caerá.

El objetivo que me he marcado es clasificar las diferentes fiestas a las que he acudido de modo que os pueda expresar mi opinión y sólo mi opinión, sobre si merece la pena acudir a ellas. En cierto modo pretendo tener una pequeña lista donde, una vez más, desde mi punto de vista, poder expresar a qué eventos es imprescindible acudir antes de que las arrugas y otras variedades os impidan hacerlo.

Como ya sabéis soy un poco talibán de ciertos aspectos relacionados con las fiestas BDSMk y por eso pido disculpas anticipadas si alguien se siente ofendido por mis comentarios que no son sino una crítica constructiva y no lo contrario.

La lista de aspectos a tener en cuenta podría ser muy extensa y por eso he intentado simplificarla de modo que contenga lo que para mi es más importante. Dentro de cada clasificación he intentado poner las preguntas que yo me haría para intentar describir mi sensación con respecto a ese punto en particular.

  • Ambiente: ¿estaba a gusto en la fiesta?, ¿me gustaba la gente que allí había?, ¿había fotógrafos no autorizados?, ¿demasiado humo?, ¿había demasiada gente?, ¿había demasiados hombres solos?
  • Instalaciones: ¿qué tal era el sitio?, ¿tenía buenas instalaciones?, ¿propiciaba el juego?, ¿era fácil conseguir una bebida?, ¿funcionaba el guardarropas?
  • Vestuario: ¿se respetaba el código de vestimenta?, ¿realmente había gente “wapa” en lo que a su vestimenta se refiere?
  • Juego: ¿había gente jugando?, ¿se apreciaba respeto entre los jugadores y mirones?
  • Políticas: ¿Se permitía el uso de cámaras?, ¿se exigía y respetaba el código de vestimenta?, ¿había zonas para no fumadores?.
Con el tiempo y espero que con vuestra ayuda iré añadiendo más preguntas a estas categorías y más categorías en sí, pero de momento esto es lo que me viene a la cabeza.

Para facilitar la labor y al más puro estilo “Itunero” pondré entre 0 y 5 estrellitas a cada categoría y después haré la media total, revisando los datos si es que añado más categorías.

Una vez más, os pido vuestra ayuda formulándome todas las preguntas que os llamen la atención y sobretodo, aquellas que os haríais antes de decidir asistir o no a una de estas fiestas.

Espero que esta pequeña clasificación os resulte interesante y en particular espero que con el tiempo seamos más y más los que acudimos a estas fiestas.

Gracias de antemano por vuestra ayuda.

Pipinkos