miércoles, 23 de septiembre de 2009

Primas hermanas III

Para muchas personas, la dominación no es prostitución, por el simple hecho de que socialmente rechazamos la prostitución y por ende no se quiere equiparar con ella. O, como decía una archiconocida Mistress:

“Una Mistress folla porque quiere, una prostituta folla porque tiene que.”

Aunque en ambos casos exista un intercambio económico por producir una erección y por ende una eyaculación y nos empeñemos en decir que no tiene un carácter estrictamente sexual.

Si un hombre se excita mientras le ponen el culo morado con 200 cañazos a cambio de 200 euracos, ninguno de los dos está cometiendo un delito sino haciendo realidad sus fantasías en un entorno Sensato, Seguro y Consensuado de la misma forma que sería al contrario, aunque eso sí, un poco más caro.

Porque aunque no me creáis es más que posible que la Mistress que está calentando el culo de la susodicha criatura esté igualmente haciendo realidad sus fantasías independientemente de que esté cobrando por ello. Y sí, queridos contertulios, estoy a favor de la dominación y me da completamente igual que me digan que es o no prostitución; porque lo que es un hecho es que se paga por un servicio sexual, sea o no tan explícito como muchos querrían pensar.

Por eso, vuelvo a recordar que tanto en el mundo de la prostitución como en el de la dominación el problema no está en las mujeres que lo ejercen sino en los proxenetas que se lucran con ello. El problema está en la explotación sexual, en el maltrato que a veces no es tan evidente, en la exclusión social y en un largo etcétera …

Continuará ...

2 comentarios:

Morgana Vatori dijo...

Ya sabía que tu ambigüedad era intencionada, Pip, te conozco. Conozco tus tonos irónicos y algo de tu ideología.

Veamos, comparto tu aceptación tanto de la dominación, como de la prostitución; como también comparto la repulsa hacía cualquier trabajo forzado. Como tú, tambien creo que la dominación es prostitución, por muchos motivos: tú hablas de la intención claramente sexual de sus actividades, pero voy más allá ¿quién me niega la sexualidad en el Strap-on o el fisting?

La frase que citas sobre que una dómina folla porque quiere y una prostituta por que tiene que hacerlo, si me permites la opinión, la veo un poco carente de sentido. Hablando de dominación profesional y prostitución libre, no se puede diferenciar en que unas lo hacen porque quieren y otras porque tienen la obligación. Sostengo que ambas deciden si quieren o no hacerlo y, a su vez, lo hacen por obligación (por haber acordado que se iba a hacer).

Bueno, a ver, que me he ido y he perdido el hilo del comentario. Recapitulo, retiro la expresión "si una dómina que no vende sexo", todas lo hacen de modo encubierto. Aunque, como dije, yo no aplicaría la palabra prostitución para esta práctica que estamos discutiendo, pues puta, entendido como todos lo entendemos, es la que vende su cuerpo y no otras cosas (aunque sí, también es puta la que vende sus "manos" o su "boca").

En resumidas cuentas, personalmente acepto la equiparación aunque de modo profundo habría que matizar mucho las cosas. Y bueno, no se a dónde quieres llegar con todo esto, pero estoy ansiosa de saberlo.

Saludos!

PD: no veo ningún motivo por el que nadie tendría que darse por aludido; las cosas están muy claras.

Pipinkos dijo...

Morgana,

Como usuario de dominación profesional nunca le pediría a una Mistress mantener relaciones sexuales explícitas. A eso me refiero cuando digo que una Mistress folla porque quiere.

En la prostitución el sexo explícito (léase penetración) forma parte del trato, en la dominación forma parte del deseo.

Efectivamente todos entendemos las connotaciones de la palabra “puta” y precisamente eso es lo triste de la prostitución.

Quizás, algún día sea un trabajo socialmente valorado como ocurría en el pasado.

Gracias por tus opiniones Mistressita ☺