lunes, 19 de abril de 2010

Viva la Vegas

Hace muchos años, cuando no existía la red que ahora lo invade todo, me sentía un bicho raro como muchos de vosotros. Recuerdo que no comprendía porqué me gustaba ver películas de piratas donde aparecían preciosas corsarias encadenadas o, leer libros sobre la inquisición y sus no tan dulces torturas. Todo este mundo me atraía de sobremanera pero no era capaz de canalizarlo. Seguía siendo un “niño” raro con gustos que nada se acercaban a lo convencional.

De la misma forma que ahora me encanta visitar un gran espacio que hay en Callao, en aquella época iba a los sótanos de la Gran Vía a comprar discos y libros en una ya inexistente tienda.
Fue entonces, cuando ojeando unas ejemplares anglosajones, cayó en mis manos un número de la revista SadoMaso que aún conservo, cuál tesoro de mi extensa colección de perversiones. Era, la primera revista en español donde se trataban esos temas que a mí me fascinaban y a otros tantos horrorizaban.

Con el tiempo atesoré una considerable colección de números, hasta que la revista desapareció de los kioskos, incluyendo alguna resurrección intermedia. Detrás de todo había un hombre que admiraba por su arrojo y valentía al publicar, junto con otros esta revista. Un hombre que ansiaba conocer para preguntarle las  mil y una dudas que tenía.

Años después, tuve la oportunidad de conocerle en una de esas fiestas míticas del Wawanco, a través de una dominante amiga de la que desgraciadamente no he vuelto a saber más.
Una vez más pasó el tiempo y tuve varios fríos encuentros con este personaje que ha sido descrito como el “padre” del BDSM en este país; hasta que la semana pasada tuve la oportunidad de asistir a su boda.

Sí amigos míos, hablo de José María Ponce y por su puesto de su idolatrada, no sin razón, Cecilia; bella y singular mujer.

Por eso, querida pareja, cuando el otro día con la mano firme fui capaz de sostener el teléfono y grabar este horroroso vídeo mientras me temblaba el pulso de la emoción, me sentí muy feliz por vosotros.
Con todo el cariño del mundo os dedico este técnicamente horripilante vídeo, de un momento inolvidable.

¡Viva las Vegas!


Viva Las Vegas from Pip Inkos on Vimeo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muchas muchas gracias, por vuestra compañía, por el vídeo, por este post, por vuestra amistad...

Akhesa

José M. Ponce dijo...

Por la parte que me toca, querido amigo, no tengo palabras para agradecer tu comentario. Me alegra saber que la revista cumplió su función y sirvió para alogo, pero, lo que de verdad, de verdad, me hace feliz es que a traves de ella he hecho amigos como vosotros. Lo demás ya lo ha dicho mi Ama. Gracias, besos y bdsm forever.
jm