domingo, 18 de abril de 2010

Primero hablar, luego seguir hablando

Decía “La Mosca” en uno de sus memorables “posts”, que la diferencia entre el mundo swinger y el mundo BDSM, es que en el swinger primero se toca y luego se habla y; en el BDSM, primero se habla y luego se toca.

Yo quisiera hoy, a través de este pequeño escrito quedarme en medio de ambos mundos y decir que con lo que realmente me siento identificado es con “primero hablar y luego seguir hablando”.
No es, por supuesto, que usando el mismo lenguaje no me guste “tocar” sino que a veces, la ausencia de una comunicación continua; no sólo al principio o al final del juego, estropea el propio juego en sí.

Ayer tuvimos la oportunidad de compartir una larga velada con una deliciosa pareja con la que por razones quizás inexplicables, me siento muy, pero que muy a gusto. Teníamos una charla pendiente desde hacía tiempo y anoche, con una especie de ansiedad instalada en el ambiente decidimos dar el paso de hablar, hablar y hablar. Todos sabíamos que ayer tocaba hablar y que ya habrá tiempo para todo lo demás.

No nos tocamos, no nos tocamos en el sentido táctil de la expresión (o quizás sí) pero, sin embargo sentí una completa armonía con ellos y a pesar de haber decidido explícitamente no “jugar”, toda la noche en sí, fue un juego sutil donde nos tocamos con palabras mientras los mojitos fluían por nuestro ser, mientras su energía penetraba en mi ser.

Ayer, queridos amigos, necesitaba compartir con vosotros muchas cosas: complicidad, perversión, cariño, amistad, pasión, energía, mucha energía que entro en mi cuerpo como un alud.

Ayer, queridos amigos, necesitaba hablar y sobre todo, tocaros con la palabra.

6 comentarios:

Dantonmaltes dijo...

Muchas gracias por el post. Ha sido una sorpesa. Ya sabes que defendemos la naturalidad y que lo que sirve para la vida cotidiana también funciona en el lado oscuro: la amabilidad, la amistad, la empatía. La gente a veces se olvida. Nosotros lo pasamos muy bien. Fui una velada mu agradable que sirvió para conocernos y entender de las razones detrás de las razones. Ya habrá otros ocasiones para que pase lo que tenga que pasar. Un beso a los dos.

Endy dijo...

Que no cesen nunca las palabras, Pip....Y si alguna vez ocurre, que sea para darle paso al silencio que envuelve y acompaña la magia de los juegos y el cruce de las miradas....

Un "besito con energía" para ambos.;)

Pipinkos dijo...

Gracias, otra vez, por tan agradable velada.

Nos vemos muy pronto :-)

Anónimo dijo...

El mosca ese me parece que se cree el dueño de todo esto, dando lecciones a todo el mundo de cómo se deben hacer las cosas...

Pipinkos dijo...

Anónimo,
El "mosca ese" es una de las personas que más trabaja por la comunidad BDSM y a quien le debemos mucho.
Él se limita a expresar su opinión sin necesidad de dar lecciones de nada e independientemente de que estés de acuerdo o no. De hecho, muchas veces yo no lo estoy.
Te ruego que ya que usas el anonimato para criticar, al menos lo hagas con educación.
Un saludo.
p

mosca cojonera dijo...

Gracias Pip :-)
la verdad anónimos SIEMPRE va a haber. Pero verás como ni un@ aparece a hablarlo en persona. No dicho como "chulería de bar", sino porque anda que no pido siempre feedback sobre qué molesta y qué no. Las criticas me las has hecho tu, Pip, personalmente, y sabes que las agradezco muy mucho. Las de l@s anonim@s son una gilipollez, no olvides que en tu blog o el mio siempre va a haber un 99% de gente que va a preferir firmar como anónimo y son comentarios que no vale la pena tener en cuenta para nada. Trolls, enferm@s mentales y amargad@s anónimos ha habido toda la vida y va a seguir habiéndolos :D Por eso tengo eterno un aviso sobre eso en mi blog.

De todos modos ya me lo dijo mi hermana una vez: "Hablas como si tuvieras la verdad absoluta". Y es algo que no tiene que ver con lo que sé (porque hay muchisimo que no sé, por eso siempre miro a quienes tienen más práctica), sino con el tono. Que por cierto, es algo que empeora por escrito, sonando a veces todavia más.
Intento controlarlo :-) A ver si lo voy suavizando.